Usuarios evaden el pago del transporte público

El gobierno de Gabriel Boric está trabajando en soluciones para disminuir la evasión en el transporte público, la cual alcanzó el 40,2% durante el primer semestre del año. Este es un tema complicado para el Ejecutivo debido a que durante el estallido social, quienes ahora ocupan cargos de poder, apoyaron la evasión como forma de protesta.

Para académicos y expertos en transporte, este es un problema complejo que tiene múltiples factores, pero enfatizan que se necesita un mensaje claro y firme del gobierno y de los líderes políticos oficiales, de que no pagar el transporte no es aceptable.

El académico de Ingeniería Industrial de la Universidad Católica, Franco Basso, destaca la importancia de la medida concreta para combatir la evasión, que ha alcanzado niveles históricos después de ocho meses. Sin embargo, el académico sostiene que es necesario demostrar un "interés genuino" en abordar el problema.

Entre los funcionarios actuales cuestionados, se encuentra Nicolás Valenzuela, miembro del directorio de Metro, quien en 2019 publicó en su cuenta de Twitter: "Evadir, no pagar, otra forma de luchar".

Franco Basso señala que resulta poco creíble presentar un plan para combatir la evasión cuando se mantiene en el directorio de Metro de Santiago a alguien que instó a la evasión del pasaje. Para el académico, antes de cualquier medida, es necesario tomar decisiones que den señales claras de que el gobierno no apoya la evasión.

De manera similar, Gerardo Ureta, académico de la Facultad de la Universidad Diego Portales, recuerda que varios miembros de la coalición de gobierno tuvieron mensajes ambiguos durante el aumento de la evasión. Por lo tanto, según Ureta, antes de implementar cualquier plan, es necesario llevar a cabo una campaña y una condena realmente transversal por parte del gobierno actual.

Los expertos proponen centrarse en lo que sucede con las personas que evaden el pago, ya que actualmente sólo quedan registrados en el Registro Nacional de Evasores y no pueden renovar su licencia de conducir si no pagan. Sin embargo, enfatizan que para los usuarios del transporte, que probablemente no tienen automóvil o no conducen, esta sanción no es un gran desincentivo.